El ansia de alcohol es un estado en el que existe un deseo extremadamente fuerte de beber alcohol. Los síntomas del ansia de alcohol se relacionan principalmente con la psique, pero no solo. También hay síntomas somáticos de ansia de alcohol. Esta condición es peligrosa porque puede conducir incluso a la interrupción de muchos años de abstinencia del alcohol; afortunadamente, hay formas de combatir el deseo.
Deseo de alcoholes un estado en el que una persona desarrolla una necesidad muy fuerte e irresistible de consumir alcohol. Una persona que experimenta este problema puede sentir una necesidad muy fuerte de beber. Cuando experimenta ansias de alcohol, los pensamientos del paciente pueden centrarse únicamente en dónde obtener el alcohol.
Síntomas de craving
Los síntomas de las ansias de alcohol afectan tanto a la psique como al cuerpo. Los síntomas mentales de las ansias de alcohol pueden ser:
- la aparición de pensamientos intrusivos sobre el consumo de alcohol,
- ansiedad,
- ansiedad,
- irritación,
- trastornos de concentración y atención,
- sensación de debilidad y f alta de energía,
- cambios de humor extremos.
Las ansias de alcohol también se manifiestan por problemas somáticos. Los pacientes pueden experimentar todo tipo de molestias internas; por ejemplo, es posible que experimenten una sensación no específica de torsión en el estómago. Cuando hay una necesidad abrumadora de beber alcohol, los latidos del corazón del paciente pueden aumentar y puede sudar en exceso. Otros problemas que pueden estar relacionados con las ansias de alcohol son los trastornos del sueño (por ejemplo, el insomnio, pero también las pesadillas), así como la disminución del apetito.
Causas de las ansias de alcohol
Es posible que una persona adicta al alcohol ni siquiera se dé cuenta de que tiene antojos de alcohol. Para tal paciente, esta condición a veces no es molesta en absoluto, porque cuando aparece el hambre, el alcohólico simplemente busca un medio que lo alivie, es decir, etanol.
Las ansias de alcohol, a su vez, son un problema principalmente para las personas que intentan superar la adicción y abstenerse del alcohol. El deseo más fuerte de alcohol ocurre en el período inicial después de dejar de beber. Con tiempola frecuencia de su aparición y la intensidad del craving están disminuyendo, sin embargo, de hecho, los episodios de craving pueden ocurrir incluso en una persona que no ha probado una gota de etanol durante varios años.
Un episodio de ansia de alcohol puede desencadenarse por factores externos e internos. Los primeros incluyen diversas situaciones que están (o estuvieron) relacionadas con el consumo de etanol. El hambre puede ocurrir en un alcohólico cuando pasa por delante de un bar que ha frecuentado en el pasado. El problema también puede surgir cuando el paciente se topa con personas que beben alcohol o incluso en una situación en la que ve un vaso en el que le gustaba preparar bebidas en el pasado.
Los factores internos que pueden desencadenar el deseo incluyen aquellas situaciones que, en teoría, podrían resolverse con el consumo de etanol. Por ejemplo, un paciente puede comenzar a sentir hambre cuando está extremadamente triste; en teoría, puede parecerle que "beber" sus penas ayudará a evitarlas. Es similar en una situación en la que un alcohólico se siente ansioso o avergonzado: en esos momentos, también puede ocurrir el ansia de alcohol, lo que sugiere que el consumo de etanol le permitirá olvidarse de los problemas por un tiempo.
Importante¿Cómo combatir las ansias de alcohol?
Las ansias de alcohol tienden a disminuir con el tiempo, pero ¿qué debe hacer un paciente que experimenta este problema y que se encuentra en las primeras etapas de la lucha contra el alcoholismo? Así como varían los síntomas del ansia por el alcoholismo, también lo son las formas de afrontar esta dolencia. Cabe recordar que para una persona adicta al alcohol, cada consumo, aunque sea único, de esta sustancia, está asociado al riesgo de recaída. Es por eso que solo tienes que luchar contra las ansias de alcohol.
La forma básica de reducir la frecuencia de las ansias es evitar situaciones que puedan provocarlas. El paciente puede evitar lugares donde ha consumido alcohol con frecuencia en el pasado, pero a veces esto no se puede hacer, por ejemplo, porque un bar familiar se encuentra justo al lado del lugar de trabajo. En tal situación, el paciente debe desviar sus pensamientos y dirigirlos a temas completamente diferentes al consumo de alcohol.
Hablar con un ser querido sobre lo que está sucediendo también puede ayudar a aliviar los síntomas de la ansia: el apoyo de los seres queridos puede ser un papel invaluable para combatir la irresistible necesidad de beber. Para superar los pensamientos intrusivos y aprender a lidiar con ellos, también puede utilizar la ayuda de psicoterapeutas.