Hablamos de una enfermedad psicosomática cuando intervienen factores psicológicos en el desarrollo de la enfermedad. Las más comunes y típicas de estas enfermedades son las llamadas los siete de Chicago. Los mecanismos del desarrollo de estos trastornos son diferentes, pero una cosa es cierta: existe una relación entre la psique y la salud humana. Los factores causantes de las enfermedades psicosomáticas incluyen, en primer lugar, el estrés, pero también otros problemas psicológicos.
Psicosomáticaes una ciencia que trata de determinar la relación entre la psique humana y las emociones experimentadas por él y la aparición de enfermedades somáticas (corporales). Debe enfatizarse que las enfermedades psicosomáticas son problemas en cuyo caso es posible confirmar objetivamente la presencia de síntomas de tales enfermedades en los pacientes, y a los que conducen, entre otras cosas, problemas psicológicos. Es este aspecto el que distingue a los trastornos psicosomáticos de varios trastornos neuróticos (incluidos los trastornos hipocondríacos), en los que los síntomas experimentados por los pacientes son causados por trastornos mentales, no por disfunciones orgánicas.
El término "psicosomático" en la terminología médica de los visitantes de la primera mitad del siglo XIX, fue introducido por un psiquiatra alemán, Johann Heinroth.
La psicosomática trata al hombre de manera holística, es decir, como un todo. Los especialistas en este campo notan una relación directa entre el estado de la mente humana y la actividad de los órganos individuales del cuerpo. La aparición de una enfermedad psicosomática puede ser motivo para reflexionar sobre su estado mental. Sucede que las personas no se dan cuenta de que viven algunos conflictos emocionales no resueltos, y sólo la aparición de un trastorno psicosomático les hace conscientes de su existencia.
Los mecanismos que causan las enfermedades psicosomáticas no están del todo claros hasta el día de hoy. Sin embargo, los científicos pudieron hacer algunas observaciones sobre su patogenia. Un ejemplo son los efectos del estrés crónico en el cuerpo humano. Las situaciones estresantes hacen que las glándulas suprarrenales aumenten la liberación de sus hormonas, que son los glucorticosteroides. Un exceso de estos compuestos en la sangre (especialmente si el factorinductor de estrés es de larga duración) es propicio para la aparición de muchos problemas de salud, incluyendo hipertensión o diabetes
Los trastornos psicológicos pueden afectar prácticamente a cualquier órgano. Los científicos que se ocupan de la psicosomática, sin embargo, distinguieron varias enfermedades, en las que la más común es la relación entre su aparición y el estado de la psique humana. Este grupo se conoce como los siete de Chicago (en la literatura en idioma inglés, estas enfermedades se pueden denominar como las siete enfermedades psicosomáticas sagradas).
Vale la pena saberloLos Siete de Chicago - el creador de la teoría
La lista de siete enfermedades en las que las emociones experimentadas por el paciente juegan un papel importante, fue creada por F. G. Alexander en 1950. Alexander se ocupó tanto de los aspectos puramente somáticos como de la psique humana: era médico y psicoanalista. Se le considera una de las personas que más contribuyó al desarrollo de la medicina psicosomática. Sin embargo, Alexander no fue el único hombre interesado en la conexión de los conflictos mentales con el estado de salud humana; este aspecto también fue tratado, entre otros, por Sigmund Freud.
Chicago Seven - las enfermedades psicosomáticas más comunes
Los siete de Chicago incluyen:
- úlcera gástrica,
- hipertensión,
- asma bronquial,
- artritis reumatoide,
- enfermedades inflamatorias del colon,
- hipertiroidismo,
- dermatitis atópica
Se supone que en el caso de las enfermedades antes mencionadas, el vínculo entre su aparición y los trastornos psicológicos es más claro. El concepto de los siete de Chicago, sin embargo, se creó hace bastante tiempo, ahora, muy probablemente, esta lista podría ampliarse para incluir otros problemas que a menudo se consideran unidades psicosomáticas. Ejemplos de otras enfermedades, cuya ocurrencia puede estar fuertemente relacionada con el funcionamiento de la psique humana, incluyen:
- obesidad,
- alteración del sueño,
- trastornos del apetito,
- migrañas,
- cardiopatía isquémica,
- tics,
- adicción a diversas sustancias,
- enfermedades autoinmunes (por ejemplo, lupus eritematoso sistémico).
Chicago Seven: ¿por qué destacar?
Los problemas identificados en los siete de Chicago son entidades de las que se conocen los mecanismos biológicos que provocan estas enfermedades. También existen métodos conocidos para tratar estas enfermedades - o enen ese caso, ¿tiene alguna justificación la existencia de la clasificación descrita?
ProblemaResulta que probablemente valga la pena considerar el papel del estrés y otros factores psicológicos en la patogenia de las enfermedades antes mencionadas. Un ejemplo de esto es la enfermedad de úlcera gastrointestinal. En la gran mayoría de situaciones (incluso en 8 de cada 10 pacientes), la úlcera es causada por una infección con la bacteria Helicobacter pylori. Curiosamente, sin embargo, la mayoría de las personas infectadas con este patógeno no desarrollan úlcera péptica durante su vida. Otro aspecto es que el 20% de los pacientes con úlceras no tienen infección por Helicobacter pylori. Los datos anteriores pueden indicar que otros factores además de la infección bacteriana también están involucrados en el desarrollo de la enfermedad de úlcera péptica, según el mencionado F.G. Alexandra y otras personas involucradas en la psicosomática, los trastornos psicológicos pueden considerarse como tales factores.
En el caso del resto de enfermedades incluidas en las siete de Chicago, en ocasiones es posible notar una relación bastante directa entre los aspectos psicológicos y su curso. Por ejemplo, en pacientes con asma pueden aparecer ataques de esta enfermedad, manifestados, entre otros, por disnea importante. Estas convulsiones pueden desencadenarse por una infección o inhalación de aire contaminado en el paciente, pero también pueden ser causadas por la experiencia de un estrés extremo. Según la psicosomática, las crisis de ahogo en asmáticos pueden estar causadas por problemas infantiles no resueltos relacionados con la relación con la madre, y desde esta perspectiva, estas crisis serían el equivalente a un llanto reprimido.
Es similar en el caso de la hipertensión arterial; después de todo, experimentar emociones fuertes puede conducir a un aumento significativo de la presión arterial. La hipertensión arterial suele ser una enfermedad idiopática, es decir, la enfermedad cuya causa directa y única no se puede encontrar. De gran importancia en el desarrollo de este problema son las cargas familiares heredadas (se produce un mayor riesgo de hipertensión en las personas cuyos familiares padecen esta enfermedad), pero otros factores ciertamente también juegan un papel: los aspectos psicológicos son potencialmente importantes entre ellos.
También es bastante fácil clasificar la dermatitis atópica entre las siete enfermedades psicosomáticas más comunes. Los cambios en la piel (como eczema y sequedad cutánea significativa), generalmente acompañados de picazón severa, pueden aparecer en un paciente después de experimentar algunos eventos estresantes. A su vez, en el caso deEnfermedades inflamatorias del intestino (como, por ejemplo, colitis ulcerosa), su patogenia no está clara hasta el momento. Se sospecha que su aparición puede verse afectada por trastornos del sistema inmunitario, y tales trastornos pueden ocurrir como resultado de la exposición a fuertes factores estresantes.
Tener en cuenta la influencia de la psique en el desarrollo de enfermedades somáticas es tan importante que podría guiar la decisión sobre los métodos de tratamiento de su problema que serían apropiados para un paciente determinado. En una situación en la que los problemas psicológicos fueran los responsables de la aparición de la enfermedad, solucionarlos podría aliviar el curso de estas enfermedades. La reducción del estrés experimentado por el paciente podría lograrse, por ejemplo, utilizando ejercicios de relajación, pero también utilizando la ayuda de un psicoterapeuta.
Cabe destacar que utilizar la ayuda de especialistas en salud mental no debe ser equivalente a dejar de visitar a un médico que previamente trató una determinada enfermedad en un paciente. Se supone que la influencia en la psique desempeña un papel de apoyo: el descuido, por ejemplo, de tomar los medicamentos recetados previamente, podría conducir al deterioro de la condición del paciente.