- Clamidia: amenaza de embarazo
- Clamidia en el embarazo: amenazas a la madre
- Clamidia en el embarazo: una amenaza para el recién nacido
- Clamidia en el embarazo: investigación
- Clamidia en el embarazo: tratamiento
La clamidia en el embarazo representa una amenaza para el embarazo así como para la salud del recién nacido y su madre. Si una mujer embarazada tiene cervicitis por clamidia, el recién nacido puede tener problemas con la vista y la respiración. ¿Cuáles son los riesgos de la clamidiosis en el embarazo?
La clamidia en el embarazodebeser diagnosticada y tratadadebido al alto riesgo tanto para el embarazo como para el recién nacido. Por ello, es recomendable realizar pruebas de cribado durante la primera visita de la gestante al ginecólogo.
Clamidia: amenaza de embarazo
La infección por Chlamydia trachomatis representa una amenaza para el embarazo.
- aumenta la incidencia de ruptura prematura de la vejiga fetal
- puede causar infecciones de la placenta o de las membranas
- puede causar trabajo de parto prematuro
- afecta el bajo peso del bebé al nacer
Clamidia en el embarazo: amenazas a la madre
La prevalencia de la infección por Chlamydia trachomatis en mujeres embarazadas se estima en un 1-3 por ciento
- uretritis
- erosiones cervicales en mujeres
- quiste
- Inflamación de la glándula de Bartolino
- inflamación de las trompas de Falopio (apéndices)
- infertilidad secundaria
- perihepatitis
Clamidia en el embarazo: una amenaza para el recién nacido
El riesgo de transmitir Chlamydia trachomatis al bebé durante el parto es del 80 por ciento.
- inflamación ocular o conjuntivitis
- infección nasofaríngea
- otitis media
- neumonía atípica
Clamidia en el embarazo: investigación
Para detectar una posible infección por clamidia, se toma una muestra del cuello uterino y la uretra y se analiza para detectar clamidia.
Clamidia en el embarazo: tratamiento
El tratamiento de la clamidia en el embarazo debe iniciarse lo antes posible después de que se detecte el patógeno; sin embargo, no se recomienda su uso en pacientes con menos de 14 semanas de embarazo. En la infección aguda no complicada, el tratamiento debe durar entre 7 y 10 días. cuando la infección es crónica, el tratamiento debe extenderse a 14 días, y en algunos casos hasta 21 días. después de unas tres semanas desdeUna vez finalizado el tratamiento, se deben realizar exámenes de seguimiento. Se recomienda un tratamiento de tres semanas en casos de recurrencia de clamidia. Al mismo tiempo, la pareja de una mujer infectada debe ser tratada obligatoriamente.
Si se encuentra infección por Chlamydia en la parturienta, no se requiere tratamiento profiláctico durante el trabajo de parto, sin embargo, es necesario avisar sobre el riesgo existente y la necesidad de observar al recién nacido.