- Tratamiento de los trastornos de personalidad: psicoterapia
- Diferencias entre psicólogo, psiquiatra y psicoterapeuta
- Tratamiento de los trastornos de personalidad: farmacoterapia
- Tratamiento de los trastornos de personalidad: otros métodos
- Psicoterapia de apoyo
El tratamiento de los trastornos de personalidad consiste principalmente en psicoterapia y farmacoterapia. Se les puede apoyar mediante la capacitación en habilidades sociales y el manejo de emociones nocivas. El efecto de la terapia es el desarrollo por parte de una persona con un trastorno de personalidad de formas nuevas y constructivas de comunicación, percepción de sí mismo y del mundo. La terapia es también una oportunidad para una participación más plena en la vida social (familia, trabajo) y la eliminación del sentimiento de alienación y desajuste.
Tratamiento de los trastornos de personalidades la búsqueda de cambiar las formas establecidas de actuar, pensar y percibir el mundo, provocadas por cambios en la psique. Dificultan la vida cotidiana de una persona con un trastorno de la personalidad porque difieren de los comportamientos socialmente aceptados. Le hacen tener problemas en el trato con otras personas y le cuesta consigo misma.
Los métodos de tratamiento utilizados son la psicoterapia y la farmacoterapia (como apoyo a la psicoterapia, porque la administración de fármacos reduce la gravedad de los síntomas del trastorno, pero no cura sus causas). Los efectos de la terapia dependen de la gravedad de los síntomas del trastorno y del momento a partir del cual se presentan. El primer paso antes de iniciar el tratamiento es acudir a un psiquiatra o psicólogo que, tras una entrevista y posibles pruebas, realice un diagnóstico. Luego, con el apoyo de un especialista, el paciente decide qué terapia elegir-individual o grupal
¡Importante! Recuerda que no todo comportamiento criticado, incomprendido o que te haga sentir peor es síntoma de un trastorno de personalidad.
Tratamiento de los trastornos de personalidad: psicoterapia
La psicoterapia individual de corta duración (hasta 10 sesiones) no funciona para el tratamiento de los trastornos de personalidad. Problemas de este tipo requieren más reuniones y un trabajo más profundo con el paciente. La confianza mutua y la participación activa de ambas partes en el proceso terapéutico son muy importantes en el proceso de tratamiento. La más efectiva (40-64%) espsicoterapia a largo plazo(más de 10 sesiones). Dando la posibilidad de insight, es decir, conocer los mecanismos del psiquismo, muchas veces inconscientes, que pudieron haber causado el trastorno. Entonces podrá trabajar eficazmente para lograr cambios curativos en la estructura de la personalidad.
Otro método para tratar los trastornos de la personalidad es psicoterapia de grupo(el tamaño del grupo no debe exceder las 10-12 personas). Luego también se trabaja sobre comportamientos, pensamientos y relaciones dañinas, pero se hace junto con otros miembros del grupo y uno o dos terapeutas. Reunirse no es solo hablar de sus experiencias, aprender formas nuevas y saludables de reaccionar. También brindan la oportunidad de confrontar y tomar conciencia de cómo lo que haces y dices afecta e interactúa con otras personas. Las reuniones se llevan a cabo en condiciones seguras, en el entorno de las personas que conocen, en una atmósfera de confianza y no juicio. Las relaciones que surgen entre los participantes del grupo son también un elemento muy importante en la terapia de los trastornos de personalidad.
Los siguientes son los más utilizados en el tratamiento de los trastornos de la personalidad:
- psicoterapia psicodinámica- se basa en la suposición de que son los mecanismos internos e inconscientes los que guían la vida humana. Durante las reuniones, el terapeuta principalmente escucha, ayuda a traer recuerdos y anima a compartir emociones, ideas o sueños.
La terapia centrada en la transferencia (TFP) se deriva de la psicoterapia psicodinámica moderna. Su creador y promotor es Otto Kernberg. En la TFP, la relación que se crea entre el paciente y el terapeuta permite al primero recrear las relaciones presentes en su vida (sociedades, profesionales, con amigos). El terapeuta ayuda al paciente a comprender e integrar todos los aspectos de la relación, incluidos los vergonzosos y difíciles: sentimientos, pensamientos, motivaciones, para que luego pueda percibirse a sí mismo y al entorno de manera coherente y uniforme. La Terapia Focalizada en la Transferencia tiene un enfoque particular en el tratamiento de pacientes con trastorno límite y narcisista de la personalidad.
- enfoques modificados derivados de la terapia cognitivo-conductual (p. ej., cognitiva, cognitivo-analítica, dialéctica-conductual): su base es la suposición de que la acción está impulsada por la forma en que piensa sobre usted mismo y su papel en el mundo. En este enfoque, el terapeuta es un experto y ayuda a comprender el problema, participa en cambiar esta forma de pensar (aspecto cognitivo) y luego de comportamiento (aspecto conductual).
La Terapia Dialéctica Conductual desarrollada por Marsha Linehan se basa en la Terapia Cognitiva Conductual. Su base es el mindfulness, que es centrarse en el “aquí y ahora”, aceptando lo que está pasando con consecuencias positivas y negativas, acabando con la lucha contigo mismo y con el entorno. La dialéctica, a su vez, es ayudar a comprender lo que está sucediendo en la vida del paciente reconciliando los opuestos y sintetizándolos, mostrando la funcionalidad endisfunción, relaciones causa-efecto. El terapeuta es más un compañero que, si es necesario, fomenta contactos adicionales para que el paciente permanezca en terapia e implemente de manera efectiva comportamientos y pensamientos nuevos y más saludables. Este tipo de terapia es especialmente útil en el tratamiento de los trastornos límite de la personalidad, también con conductas que amenazan la vida y la salud del paciente, así como los trastornos de la alimentación o, por ejemplo, la adicción a los opiáceos.
Las terapias mencionadas anteriormente permiten que el terapeuta sea más directo y activo, lo cual es muy importante cuando el trastorno empeora o cuando aparecen pensamientos e intentos de suicidio y autolesiones.
Vale la pena saberloDiferencias entre psicólogo, psiquiatra y psicoterapeuta
Psicóloga egresada de estudios universitarios en psicología. Él diagnostica y realiza pruebas, da opiniones, brinda asesoramiento psicológico y educa.
Psiquiatra egresado de la carrera de medicina y especializado en psiquiatría. Él diagnostica, realiza farmacoterapia, emite recetas, licencias por enfermedad y referencias al hospital. Puede realizar psicoterapia si se graduó de la escuela psicoterapéutica.
El psicoterapeuta tiene una maestría (por ejemplo, psicología, pedagogía, sociología, medicina) y se graduó o se graduó de la escuela de psicoterapia, lo cual se confirma mediante un examen y un certificado de psicoterapeuta.
Psicólogo, psiquiatra, psicoterapeuta y entrenador: ¿a quién contactar con sus problemas?
Ver la galería de 10 fotosTratamiento de los trastornos de personalidad: farmacoterapia
La farmacoterapia generalmente se usa periódicamente, cuando aparecen síntomas particularmente molestos del trastorno. Se utiliza principalmente para calmar las emociones, regular el estado de ánimo, reducir el nivel de ansiedad y los síntomas de depresión. Ayuda a superar las crisis y mejorar su bienestar. La farmacoterapia puede combinarse con psicoterapia a largo plazo cuando el trastorno de personalidad es grave. Sin embargo, cuando se utiliza como forma única de tratamiento, no elimina el trastorno de personalidad.
Un ejemplo del uso de la farmacología en el tratamiento de los trastornos de personalidad es el tratamiento antipsicótico, que ayuda a reducir la sospecha hacia los demás y también se utiliza en el tratamiento de trastornos de personalidad como la esquizoide o la paranoia, cuando se producen alucinaciones auditivas o paranoia. Aparecer. Los medicamentos del grupo de los estabilizadores del estado de ánimo se utilizan para reducir la impulsividad y la agresión.
En la farmacoterapia de los trastornos de la personalidad se utilizan fármacos de diferentes grupos, pero se seleccionan individualmente. Porque los síntomas individuales del trastorno, aunque tengan el mismo nombre, pueden diferir en su origen o gradogravedad. Por ejemplo:
- Los medicamentos del grupo de los neurolépticos tienen un efecto antipsicótico y, además, pueden, según los síntomas que acompañan al trastorno, calmar (durante la agitación motora) o activar (influenciando el impulso psicomotor, contrarrestar los síntomas negativos de el trastorno) o tener un efecto positivo en un estado de ánimo deprimido,
- antidepresivos, además de su efecto antidepresivo, apoyan el tratamiento de la ansiedad y los ataques de ansiedad; fobia social acompañada de estrés y miedo a hacer contactos y relaciones sociales; terapias para el dolor y trastornos de estrés postraumático,
- la función de los fármacos ansiolíticos es eliminar o reducir síntomas psicopatológicos únicos. Tienen efectos ansiolíticos, hipnóticos, anímicos, hipnóticos y sedantes.
Tratamiento de los trastornos de personalidad: otros métodos
El entrenamiento en habilidades sociales, cuya base es el aprendizaje, entre otros, es útil en el tratamiento de los trastornos de personalidad:
- modelando nuevos comportamientos,
- maneras de lidiar con las emociones difíciles (por ejemplo, la ira),
- capacidad para responder adecuadamente a la situación (por ejemplo, en una conversación),
- desarrollar la autoestima,
- reglas de comunicación
Este tipo de herramientas se utilizan en terapia individual, grupal y de apoyo
Psicoterapia de apoyo
La psicoterapia de apoyo está diseñada para ayudar al paciente a funcionar mejor, pero no cambia la personalidad y los mecanismos de defensa, es decir, los que protegen el ego. El terapeuta de apoyo brinda comprensión y ayuda, enfatiza las cualidades positivas del paciente y el papel de confiar en uno mismo. Ayuda a mantener los resultados obtenidos durante la terapia a largo plazo, a reconocer patrones de acción posteriores que dificultan la vida y a cambiar el umbral de tolerancia a experiencias difíciles, es decir, desencadenantes de comportamientos o formas de pensar no saludables. Esto significa que el paciente aprende sus señales consecutivas (emocionales, cambios de humor, patrones de pensamiento) que previamente desencadenaron comportamientos no saludables, los resuelve y crea otros nuevos y constructivos. La psicoterapia de apoyo también es elegida por aquellas personas que no tienen suficiente motivación para emprender una terapia a largo plazo, y la situación es tan difícil para ellos que necesitan ayuda.