La glomeruloesclerosis focal y segmentaria es una lesión patológica que afecta a los glomérulos. Esta esclerosis se asocia con proteinuria, que si continúa durante mucho tiempo provoca daños en los riñones y deterioro de su función básica, es decir, la filtración. La causa de la enfermedad aún no está clara, pero se supone que se trata principalmente de trastornos del sistema inmunitario.

Glomeruloesclerosis segmentaria focalAfecta principalmente a hombres jóvenes. El nombre de la enfermedad está asociado con el cuadro morfológico. El examen microscópico muestra fibrosis y glaseado de los glomérulos, así como algunos fragmentos de asas vasculares enteras. Todo esto perjudica la filtración, por lo que reduce significativamente la eliminación de toxinas acumuladas en el organismo.

Esclerosis glomerular: síntomas

Los síntomas de la enfermedad aparecen de forma gradual, y su gravedad depende estrictamente del grado de los glomérulos afectados. Muchos de los síntomas no se atribuyen necesariamente a esta entidad patológica sola, sino que pueden acompañar a otros, que son difíciles de diagnosticar. Los más significativos son:

  • síndrome nefrótico, que es un síntoma complejo causado por la pérdida excesiva de proteínas en la orina (más de 3,5 gramos/día); además, hay lipiduria, hiperlipemia y edema
  • hematuria, es decir, la presencia de glóbulos rojos en la orina
  • en el caso de síntomas prolongados, se desarrolla hipertensión, lo que debilita aún más el funcionamiento de los riñones
  • hinchazón, no solo periférica, sino también alrededor de los párpados
  • en el examen general de orina, la clave es identificar la proteinuria no selectiva, lo que significa que en la orina aparecen varias proteínas, no solo la albúmina; después de un tiempo, se observan otros compuestos, como aminoácidos, glucosa o fosfatos; todo esto indica daño en los túbulos renales

Diagnóstico de glomeruloesclerosis

El diagnóstico de la enfermedad requiere la implementación de diagnósticos apropiados. Es extremadamente importante realizar una entrevista detallada con el paciente e identificar las principales quejas. Primero, el médico ordena una prueba general de orina, que muestra proteinuria no selectiva, a veces hematuria. A medida que la enfermedad progresa, se observauna tendencia a valores más altos de presión arterial

Para el diagnóstico final es necesaria una biopsia renal con evaluación histopatológica. Dado que la sintomatología no está clara, en la diferenciación se deben considerar diferentes estados patológicos que pueden conducir a cambios morfológicos similares en los glomérulos. Debes tener en cuenta: Formas secundarias de glomeruloesclerosis, por ejemplo en el curso de una obesidad severa o en drogadictos que consumen habitualmente heroína.

Tratamiento de la glomeruloesclerosis

El manejo terapéutico de la glomeruloesclerosis depende estrictamente de la progresión de la enfermedad diagnosticada. Tiene en cuenta no solo el estado clínico del paciente, sino también la gravedad de la proteinuria. Un bajo grado de proteinuria puede controlarse modificando la dieta, limitando el suministro de proteínas y sal. A veces se requiere farmacoterapia: los inhibidores de la convertasa son el fármaco de primera línea. Los pacientes con proteinuria grave están sujetos a un manejo terapéutico más avanzado, a saber, terapia con glucocorticoides (que reciben esteroides), a veces en combinación con terapia inmunosupresora.

El pronóstico es grave, casi la mitad de los pacientes desarrollan enfermedad renal terminal después de 10 años. El curso de la enfermedad es diferente y, como se mencionó anteriormente, depende, entre otros, de sobre la gravedad de la proteinuria.

Desafortunadamente, cada acción farmacológica conlleva un riesgo de efectos secundarios, especialmente en pacientes sometidos a terapia con esteroides. Muy a menudo hay infecciones, úlceras estomacales, diabetes u otra distribución del tejido adiposo, lo que comúnmente se conoce como cuello de búfalo. Todo esto se traduce en una reducción de la dosis terapéutica, lo que lamentablemente retrasa la eficacia del tratamiento de la glomerulopatía.