La albuminuria es un síntoma en el que las proteínas de molécula pequeña (llamadas albúmina) están presentes en la orina. Se supone que hasta una determinada concentración la albuminuria es un fenómeno fisiológico (normoalbuminuria), pero los valores más altos siempre deben ser motivo de preocupación, ya que pueden indicar una enfermedad que todavía es clínicamente silenciosa en este momento.

Contenido:

  1. ¿Qué es la albúmina?
  2. Causas de la albuminuria
  3. Albuminuria y enfermedad renal crónica
  4. Albuminuria: síntomas clínicos
  5. Diagnóstico de albuminuria
  6. Albuminuria como factor pronóstico
  7. Albuminuria: recomendaciones

Albuminuriaen terminología médica solo nos dice que ha aparecido albúmina en la orina, no necesariamente en concentraciones anormalmente altas. Sin embargo, en este artículo, para no confundir al lector, en aras de la simplicidad se puede suponer que el término "albuminuria" es un fenómeno patológico.

¿Qué es la albúmina?

Hablando de albuminuria, vale la pena mencionar primero qué es la albúmina. La albúmina son proteínas que se encuentran naturalmente en el plasma de animales y plantas. El hígado es el responsable de su producción en nuestro organismo.

La albúmina representa más de la mitad de todas las proteínas en la sangre, y su presencia es esencial para el buen funcionamiento de todo el cuerpo.

Además de mantener la presión arterial oncótica normal y ser un amortiguador importante en ella, la albúmina también desempeña un papel en el transporte de numerosas sustancias. En algunos estados de enfermedad, su producción puede reducirse o "escapar" excesivamente, con consecuencias negativas.

Causas de la albuminuria

En condiciones fisiológicas, los glomérulos sólo excretan una pequeña cantidad de albúmina. Si la estructura de los riñones está dañada, aumenta el nivel de albuminuria. Tal condición puede ser causada, por ejemplo, por hipertensión arterial a largo plazo, tratada ineficazmente, o por muchos años de diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2. Se cree que la albuminuria puede ser un indicador de daño no solo en las nefronas, sino también a todos los pequeños vasos del cuerpo.

Diversas enfermedades renales crónicas en su curso provocan una pérdida paulatina de nefronas, a consecuencia de lo cual las restantes por sobreexplotación tambiénpierden lentamente su función. Algunos autores creen que el daño renal continúa incluso cuando los glomérulos están en relativamente buenas condiciones. Según ellos, esto se debe a que la albúmina daña significativamente los túbulos renales al activar en ellos células proinflamatorias.

Las enfermedades que pueden causar albuminuria incluyen:

  • diabetes
  • hipertensión
  • glomerulopatía
  • enfermedad vascular renal
  • mieloma múltiple
  • cáncer de riñón
  • poliquistosis renal
  • enfermedades sistémicas del tejido conjuntivo
  • agrandamiento significativo de la próstata u otra obstrucción en el flujo de orina
  • enfermedades inflamatorias intersticiales

Albuminuria y enfermedad renal crónica

El nivel de albuminuria según las directrices KDIGO de 2012 es uno de los criterios para clasificar la enfermedad renal crónica en un estadio específico. La cantidad de albuminuria viene determinada por el cociente albúmina/creatinina (ACR) en cualquier muestra de orina o el nivel de albúmina, que se mide en una muestra de orina de su recogida diaria. Se pueden distinguir las siguientes categorías de albuminuria:

  • A1 - pérdida de hasta 30 mg de albúmina por día o relación ACR<30 mg/g
  • A2 - pérdida de 30-300 mg de albúmina por día o tasa ACR 30-300 mg/g
  • A3 - pérdida de más de 300 mg de albúmina por día o relación ACR>300 mg/g

Si la albuminuria supera los 300 mg al día, se denomina proteinuria manifiesta.

Albuminuria: síntomas clínicos

La albuminuria no es una enfermedad en sí misma, sino solo un síntoma de una enfermedad que ocurre en el cuerpo. A veces, sin embargo, puede acompañarse de otros síntomas relacionados con la fuga de proteínas con la orina. La albúmina en el lecho vascular es la encargada de mantener la correcta presión oncótica. Esto significa que evitan que el plasma se escape de los vasos hacia los espacios tisulares que los rodean. Es poco probable que la albuminuria leve produzca síntomas clínicos adicionales. Sin embargo, incluso a valores más altos, cuando la albúmina no es suficiente, los líquidos se escurren de los vasos y puede producirse hinchazón, principalmente alrededor de los tobillos. La orina espumosa característica también se puede observar con proteinuria.

Diagnóstico de albuminuria

Cabe recordar que medir el nivel de albúmina en una sola muestra de orina, es decir, el cociente albúmina/creatinina, es una prueba de detección que solo da una idea del estado de los riñones. La prueba diagnóstica es la medición de la albuminuria en la recolección de orina de 24 horas, y solo este método es lo suficientemente confiable para hacer una evaluación precisa.diagnóstico. El diagnóstico de albuminuria siempre debe ir acompañado de un análisis general de orina, que nos ayudará a detectar, por ejemplo, una posible inflamación, porque sólo un conjunto de pruebas de este tipo nos garantiza un diagnóstico certero. Los pacientes a los que queremos realizar análisis de orina pueden no presentar síntomas de cuadros agudos o exacerbaciones de enfermedades crónicas, inflamaciones, no pueden realizar esfuerzos físicos intensos, porque tales situaciones pueden distorsionar los resultados de las pruebas de laboratorio.

Albuminuria como factor pronóstico

Se ha demostrado en muchos estudios que la albuminuria sigue siendo un factor independiente que aumenta el riesgo de enfermedades como eventos cardiovasculares (por ejemplo, ataque cardíaco, accidente cerebrovascular), insuficiencia cardíaca y también conduce a la progresión de la enfermedad renal crónica y aumenta el riesgo de muerte. Las pruebas de detección que pueden revelar la presencia y el grado de albuminuria deben incluirse en pacientes con enfermedad renal crónica, diabetes, hipertensión y aquellos con antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular. Además, no se recomienda la detección de albuminuria en personas asintomáticas y de bajo riesgo. No obstante, conviene recordar que la albuminuria también puede aparecer en personas sanas cuando van acompañadas de obesidad, dieta rica en proteínas, ejercicio intenso, inflamaciones e infecciones diversas, y también en fumadores.

Albuminuria: recomendaciones

Si ha aparecido albuminuria en una persona sin antecedentes de enfermedades cardiovasculares, metabólicas o nefrológicas, solo se puede hacer un chequeo para ver si fue transitoria y poder encontrar una explicación a su presencia. Sin embargo, si se detecta albuminuria en un paciente crónico, se debe realizar rápidamente bajo la supervisión de un nefrólogo.

Los pacientes con hipertensión deben controlar su presión arterial regularmente en casa y consultar a un médico si es necesario, para que se mantenga dentro del rango correcto en todo momento.

A menudo, en ausencia de contraindicaciones, los pacientes con albuminuria reciben inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (ACEI) o antagonistas de los receptores de angiotensina (ARB) porque tienen efectos renoprotectores comprobados y se recomienda su uso en pacientes con albuminuria, incluso cuando no se acompaña de hipertensión arterial. Si bien los pacientes con diabetes mellitus tipo 1 pueden ser derivados a un nefrólogo solo cinco años después del diagnóstico de la enfermedad, cuando se les diagnostica diabetes tipo 2, dicho paciente debe acudir a dicha cita desdede inmediato. Está relacionado con el diferente curso de ambos tipos de diabetes. La diabetes tipo 1 es muy dinámica y se detecta inmediatamente. La diabetes tipo 2, por otro lado, puede durar muchos años y pasar desapercibida, dañando los riñones todo el tiempo. El médico que realiza el diagnóstico nunca sabe cuánto tiempo han estado dañados los riñones, por lo que se debe implementar un diagnóstico completo de inmediato. En ambos grupos de pacientes diabéticos se debe realizar un seguimiento de posible albuminuria una vez al año