- El clima desencadena o intensifica dolencias
- La influencia del clima en los problemas cardíacos y estomacales
- ¿Cómo reaccionamos ante los altibajos y las tormentas?
Aunque este invierno fue bastante suave, nos despedimos con alivio. Pero hay personas que son reacias a pensar en el comienzo de la primavera: meteorópatas. Este es el peor momento para ellos, al igual que finales de otoño. El clima cambiante típico de estas estaciones tiene un efecto negativo en su bienestar.
Se estima que cada tercera persona que vive en nuestra latitud reacciona con síntomas alclima- las mujeres son 3 o 4 veces más frecuentes que los hombres, lo que está relacionado con el mensualcambios hormonalesen su cuerpo. La sensibilidad al clima aumenta con la edad y… con la carcasa (las personas consobrepesoson más susceptibles a las auras antiestéticas que las personas delgadas). Pero cuanto más optimista y endurecida es una persona, menos problemas tiene con la situación cambiante fuera de la ventana.
El clima desencadena o intensifica dolencias
¡El efecto del clima en el bienestar es un hecho, y la predicción del pastor de lluvia sobre la base de la rotura de sus huesos es correcta! No nos enfermamos por el clima, solo causa o empeora las dolencias. El aura cambiante afecta los parámetros y funciones del organismo que son importantes para la vida, incluyendo sobre el número de glóbulos rojos y blancos, concentración de hemoglobina, presión y volumen sanguíneos, suministro de sangre al cerebro, ritmo cardíaco, secreción hormonal, temperatura corporal, función hepática y renal, tono muscular. Nosotros mismos somos los responsables de caer en la meteoropatía, porque estamos demasiado lejos de la naturaleza. Por eso tenemos dificultad para adaptarnos a los caprichos del aura, somos cada vez menos endurecidos y cada vez más propensos a contraer cualquier infección.
Debes hacerloConsejos para meteorópatas
- Mejore su condición física: haga ejercicio regularmente y pase el mayor tiempo posible al aire libre, independientemente del clima.
- Duerma lo suficiente: su cuerpo necesita al menos 6 horas de sueño al día para recuperarse adecuadamente.
- Cuida tu dieta - enriquece tu menú diario con vitaminas y microelementos que tienen un buen efecto sobre el sistema nervioso (incluyendo magnesio, vitaminas B).
- Limite el consumo de té y café fuertes: sensibilizan el sistema nervioso; reemplácelos con agua mineral, jugos de frutas y verduras.
- Endurecerse: visite la sauna, tome duchas alternas de agua fría y caliente por la mañana, termine con una fría.
- Escuche música: incluso después de un día tormentoso, sus canciones favoritas calmarán sus nervios y mejorarán suestado de ánimo.
- Quédese en habitaciones bien iluminadas: mucha luz cálida en un día oscuro lo ayuda a relajarse.
- Rodéate de gente optimista, con ellos es más fácil sobrellevar los males del tiempo.
La influencia del clima en los problemas cardíacos y estomacales
Cuando cambia el clima, las dolencias relacionadas con enfermedades crónicas se intensifican, incl. con ulcerativo, cardiovascular, reumatismo, asma. Las personas con estas condiciones pueden tratar de aliviar los efectos adversos del aura. Durante el paso de los frentes atmosféricos, el cuerpo no debe sobrecargarse de esfuerzo, tanto físico como mental. Los cardíacos deben evitar las emociones fuertes y las úlceras deben cuidar una dieta adecuada. Las hierbas también son útiles, alivian el sistema nervioso, facilitan el sueño y ayudan a sobrellevar las dolencias estomacales (por ejemplo, la raíz de valeriana, los conos de lúpulo, la flor de la pasión y la melisa).
ImportanteMarek Majcher, experto en temas biometeorológicos : Actualmente no hay investigaciones sobre qué regiones geográficas de Polonia son mejores y cuáles son peores desde el punto de vista de la meteoropatía. Adicionalmente, cabe señalar que la variabilidad del clima está asociada a una serie de enfermedades somáticas (cardiológicas, neurosis, depresivas, asmáticas, reumatológicas). Hay muchas personas que no son meteorópatas típicos, y debido a que tienen otras enfermedades, constituyen un gran grupo susceptible a los estímulos meteorológicos. En las condiciones climáticas de Polonia, todo el año nos puede hacer pasar un mal rato. El mantenimiento prolongado de un aura estable es único y, por lo tanto, los polacos tienen derecho a quejarse del clima, o más bien de su gran variabilidad. Estadísticamente, el peor a este respecto es marzo, cuando el número de frentes atmosféricos que pasan por Polonia es el más alto (además también parte de febrero y abril). El segundo período percibido negativamente por los meteorópatas es noviembre y diciembre (la época de la llamada depresión otoñal) debido a un repentino y significativo acortamiento del día, así como a fluctuaciones de presión más frecuentes y mayor cantidad de lluvia. Sin embargo, esto no es una regla: noviembre del año pasado fue uno de los meses con un clima más estable, y esta vez no fue posible quejarse del otoño pasado.
¿Cómo reaccionamos ante los altibajos y las tormentas?
Nos sentimos mejor cuando empieza a aclararse después de la baja y durante los primeros 7-10 días del auge. Desafortunadamente, hay pocos días así en un año. Estamos mucho más expuestos a los efectos adversos del clima. Cuando pasan los frentes meteorológicos (hay unos 140 días en un año), aumenta el número de suicidios, aumentan los infartos, aparecen hemorragias por úlceras gástricas, dolores de cabeza y migrañas.Los accidentes son más frecuentes: accidentes de tráfico, cuando se trabaja a gran altura. La mayoría de ellos se observan 24 horas antes de la llegada del frente. Este período también es favorable para el parto. Por otro lado, las bajas ventosas intensifican los dolores reumáticos, los síntomas del asma y ya elevan la presión arterial alta. La lluvia que se aproxima aumenta las dolencias en las articulaciones, y cuando las nubes pesadas cuelgan justo sobre el suelo, las personas propensas a las alergias se quejan de párpados hinchados, picazón en los ojos y fiebre del heno. A su vez, las tormentas provocan sensación de ansiedad, trastornos circulatorios y dificultan la concentración. Debido a las descargas atmosféricas, aumenta la cantidad de iones positivos en el aire, lo que es malo para tu bienestar. Por otro lado, la ionización negativa del aire, que sentimos después de una tormenta como aire excepcionalmente fresco, tiene un efecto muy beneficioso sobre nosotros.
"Zdrowie" mensual