Se estima que uno de cada dos pacientes oncológicos utiliza métodos naturales de tratamiento del cáncer - utiliza el llamado medicina alternativa o complementaria. Las consecuencias de esto varían. Algunos de los métodos son indiferentes a la salud, otros pueden apoyar el tratamiento, pero también los hay que pueden dañar gravemente al paciente.
El cáncer es uno de los mayores desafíos de la ciencia moderna. Es natural que ante semejante amenaza la gente busque esperanza, esté dispuesta a creer cualquier cosa. E Internet está repleto de tratamientos "efectivos" y milagrosos para el cáncer. Ofrece sustancias misteriosas y tratamientos curativos mágicos. Sin la preparación de un especialista, no podemos verificar cuál de la información proporcionada es verdadera. La publicidad agresiva y muy sugestiva y la promesa de recuperación total son tentadoras a pesar de los altos costos. Popular en Internet, y muy caro, es, por ejemplo, la hipertermia sistémica, es decir, calentar todo el cuerpo unos pocos grados centígrados. Sí, la hipertermia se usa en oncología, pero solo junto con quimioterapia o radioterapia.
No reduzcas tus posibilidades
Los métodos de tratamiento no convencionales incluyen técnicas y métodos no aceptados o poco considerados por la medicina occidental. ¿Por qué? Porque no han sido verificados por ensayos clínicos. E incluso si algunas sustancias se han probado en laboratorios o incluso en animales, todavía no hay garantía de que funcionen de la misma manera en humanos. Sin embargo, si desea utilizarlos, asegúrese de hablar con su oncólogo al respecto y no abandone el tratamiento convencional. Desafortunadamente, sucede que, bajo la persuasión de varios curanderos, los pacientes dejan de tomar medicamentos, abandonan la quimioterapia o la radioterapia. La mayoría de estas decisiones acaban con un importante deterioro de la salud.
Conoce la escala del riesgo
Un ejemplo clásico es la amigdalina, una sustancia que se encuentra en las semillas de albaricoque. La amígdala contiene cianuro, que es un veneno mortal. El efecto de la amigdalina en el tratamiento del cáncer se probó en ratones. Por el contrario, lo que funciona para los roedores puede no funcionar para los humanos, y no se han realizado estudios en humanos. Los pacientes que toman medicamentos comprados en línea a menudo terminan en el hospital con síntomas de envenenamiento por cianuro, otro éxito es la capsaicina, que se encuentra en los chiles. Los pacientes hacen conellos tinturas en aceite de oliva y bebida. La capsaicina es extremadamente fuerte: irrita (corroe directamente) la mucosa de la garganta, el esófago y el estómago. Su uso puede dar lugar a erosiones, heridas que no cicatrizan y, en consecuencia, incluso a otro tipo de cáncer. No hay evidencia de que el uso de capsaicina pueda ayudar a combatir el cáncer. Quizás el ejemplo más dramático es la introducción de garbanzos debajo de la piel. Tales prácticas pueden provocar una infección general del cuerpo, incluso sepsis. Muchos métodos no convencionales de "tratar" el cáncer son biológica y médicamente absurdos. Tan absurdos que parece que nadie los alcanzará. Y sin embargo… hay quienes creen que a través de una herida supurante, un agujero en la pierna, a una persona le va a salir un cáncer.
¿Qué comer en el cáncer?
Vale la pena saberloApoya la curación
1. Dejar de fumar
Está comprobado que cuando no fumamos, la quimioterapia y la radioterapia son más efectivas y las heridas postoperatorias cicatrizan mejor. Mucha gente piensa que como hay cáncer, ya no tiene sentido dejar de fumar. Nada podría estar más equivocado. Las toxinas del humo del cigarrillo envenenan el cuerpo y empeoran los resultados del tratamiento. Vale la pena comunicarse con el Centro Nacional de Consejería Telefónica para Fumadores al 801 108 108, donde trabajan especialistas preparados para apoyar a los pacientes oncológicos.
2. Acupuntura
Este es un método probado para mejorar el bienestar del paciente. No cura el cáncer, pero puede reducir los efectos de la quimioterapia. Los tratamientos de acupuntura alivian las náuseas y algunos dolores y molestias. Si el tumor está ubicado, por ejemplo, en el área de la columna vertebral, la punción en los lugares apropiados traerá alivio. Los académicos de centros oncológicos de renombre tampoco subestiman la meditación, el yoga y la oración. Incluso están convencidos de que hace que los pacientes se sientan mejor.
3. Marihuana
Se puede utilizar para aliviar el dolor, aumentar el apetito y aliviar las náuseas y los vómitos. Estos últimos suelen ser más eficaces que los medicamentos que se recetan actualmente a los pacientes.
4. Dieta de fácil digestión
Es un elemento importante de la terapia del cáncer. Se debe consensuar con un oncodietista que sabrá qué nutrientes necesita más un determinado paciente, para no llegar a la destrucción del organismo. Los principios generales de una dieta que vale la pena seguir mientras se trata el cáncer no son gran cosa. Tantas verduras y frutas como sea posible, y la menor cantidad de alimentos altamente procesados
5. Actividad física
Es muy difícil movilizarse cuando el enfermo está atormentado por náuseas, vómitos, está debilitado, se cansa fácilmente. pero en mejores momentossintiéndose bien, vale la pena salir a caminar, y cuando no tenemos fuerzas para eso, hay que hacer ejercicios sencillos, incluso en la cama. Mover los músculos ayuda a la curación, ya que estimula el sistema inmunológico para que funcione mejor.